2021
Samuel García Oteiza
Profesor Guía: Wren Strabucchi
Si bien Fuegopatagonia fue intensamente cartografiada a partir del siglo XVI, fue con la presencia Estatal que la cartografía comenzó a registrar los caminos de este territorio.
En otras palabras, la fuente cartográfica no registró camino alguno en Fuegopatagonia por casi tres siglos y medio, específicamente entre 1523-1896. A partir de lo anterior, la tesis estudia la relación entre cartografía y camino en Fuegopatagonia, centrándose en el umbral del registro del camino en la cartografía -esto es, el momento inmediatamente previo al registro- y su posterior consolidación en ella.
En este contexto surge la siguiente interrogante: ¿Qué rol juega la cartografía en su calidad de fuente documental para acceder y conocer las caminerías practicadas en Fuegopatagonia entre 1870-1910; a saber; las caminerias nativas, baqueanas y estancieras-estatales?
La hipótesis central de la tesis sostiene que la cartografía en Fuegopatagonia registró un tipo de caminería y obliteró otras. En primer lugar, cuando no registró caminos (1870-1896), obliteró la camineria nativa y baqueana y, en segundo lugar, cuando comenzó a registrar caminos, es decir la camineria estanciera-estatal (1897-1910), obliteró nuevamente todo rastro caminero de nativos y baqueanos. En consecuencia, la cartografía consolidó una imagen caminera hegemónica, una imagen que contrasta con la heterogeneidad y las realidades camineras del territorio.
Ante este panorama, la tesis busca demostrar que la cartografía y su registro del camino efectivamente obliteró las caminerias baqueanas y nativas. A través de diferentes indicios, dispersos en distintas fuentes documentales, así como la construcción de distintas imágenes (diagramas, mapas, dibujos), esta investigación busca identificar las caminerías obliteradas en la cartografía. En este sentido, la tesis propone una nueva mirada para acceder y adentrarse en las caminerías fuegopatagónicas.